La Diputación inicia su “gran transformación” con más de 330 plazas de empleo público

El Consejo de Gobierno aprobará en octubre la que será la primera oferta pública de empleo masiva de la Diputación Foral desde hace más de una década. En concreto, la institución prevé dar el visto bueno de forma definitiva en dicho mes a la OPE correspondiente a 2018, que englobará más de 310 plazas. Sumadas a las 21 correspondientes a la OPE del año pasado, sacará a concurso-oposición más de 330 plazas, cuyos exámenes se irán convocando de forma gradual durante los próximos tres años. Esta decisión marcará, según ha explicado el diputado de Gobernanza y Comunicación con la Sociedad foral Imanol Lasa, un “antes y un después” en el proceso de transformación de la institución, ya que permitirá sentar las bases para “construir la Diputación del futuro, reforzando actuaciones estratégicas como el impulso del empleo y la atención social, y dando una mejor respuesta a las nuevas exigencias y demandas de la sociedad de Gipuzkoa”.

La OPE permitirá, por un lado, incorporar nuevos perfiles, juventud y talento a la institución, un proceso de relevo generacional obligado, teniendo en cuenta que más de 900 trabajadoras y trabajadores públicos se jubilarán en los próximos siete años, lo que supone aproximadamente la mitad de la plantilla foral. Con este objetivo, en la fase de concurso se valorará entre otras méritos la formación académica y el conocimiento de idiomas. “La Diputación necesita gente bien preparada, con nuevas competencias, y con esta OPE abrimos las puertas a una nueva generación a la que animamos a participar en el proceso, porque su incorporación es necesaria para seguir mejorando el servicio público y la respuesta a las necesidades de la ciudadanía”, ha señalado.  

Por otro, esta OPE redundará en la estabilidad del empleo público de la Diputación, ya que en las bases se valorarán los años de trabajo en administraciones públicas. Esta medida tiene por objeto reducir la tasa de interinidad, superior al 30%, y que ha ido aumentando, dada la prohibición del estado de realizar OPEs. Además, y con el mismo objetivo, el personal funcionario de carrera podrá participar en los turnos de promoción interna, fórmula con la cual se cubrirán en torno a 40 plazas del total de 330.

La OPE prevé contemplar especialmente los puestos de trabajo transversales, como el personal técnico de administración general (TAGs), economistas, informáticas e informáticos, personal técnico medio, y administrativas y administrativos –que conforman aproximadamente el 40% de la plantilla-. Lasa ha calificado estos puestos de “columna vertebral” para el funcionamiento de la institución por su polivalencia, aunque según ha dado a conocer, también se ofrecerán plazas de tipo más específico o sectorial, para las que se requerirán perfiles como los de ingeniería en telecomunicaciones, caminos, agricultura, medio ambiente, arquitectura, psicología, enfermería, deportes o trabajo social. Más de la mitad de las plazas serán de cualificación media o alta.

Ya en noviembre de este año se aprobarán las bases de los primeros exámenes,  correspondientes a las OPEs de TAGs, con más de 30 plazas, trabajadores y trabajadoras sociales,  alrededor de 25, y personal médico de valoración de la dependencia y la discapacidad, con 3. La figura del TAG es clave en las secretarías técnicas de la Diputación, y su refuerzo se traducirá en una mayor agilidad y rapidez a la hora, por ejemplo de tramitar subvenciones, contrataciones y ofrecer asesoramiento jurídico. En cuanto a las OPEs relacionadas con el departamento de Políticas Sociales,  Lasa ha apuntado que las necesidades de atención social “están creciendo, por lo que que vamos a necesitar más recursos para seguir ofreciendo un buen servicio a quienes más lo necesitan. Es un ámbito prioritario”. 

Otra de las novedades consiste en que, por primera vez, se ofrecerán en la OPE tres plazas destinadas específicamente a personas con discapacidad intelectual, después de haber realizado un estudio detallado de los puestos de trabajo con el fin contemplar en las OPEs puestos específicos y adaptados para este colectivo. Esta medida, “pionera”, responde al objetivo de hacer de Gipuzkoa un referente del trabajo en pro de la inclusión social, normalizando la participación de las personas con discapacidad también en la función pública.

El cálculo de número de plazas anunciado hoy se ha realizado aprovechando al “máximo” el margen ofrecido por la ley de presupuestos estatal, y la flexibilización de las condiciones para la oferta de empleo público, tanto en la tasa de reposición, destinada a cubrir jubilaciones en áreas prioritarias, como en lo relativo a la consolidación y estabilización, modalidades que permiten convocar puestos cubiertos de forma interina desde 2005 y 2015, respectivamente.  Lasa ha avanzado que este “esquema general”, diseñado fruto del estudio plaza por plaza por parte de la dirección de Función Pública, se concretará de forma acordada con los sindicatos, para lo cual se iniciarán conversaciones en breve y con una “voluntad plena” de consenso. 

La última OPE de gran entidad de la Diputación data de 2006. Constó de 193 plazas y se presentaron 7.708 instancias. La pasada legislatura la oferta de empleo fue prácticamente inexistente, ya que en cuatro años solo se sacaron cinco plazas. La legislatura actual supone “un hito” en la revitalización del empleo público, ya que entre OPEs y bolsas de trabajo, en estos años se han presentado a los procesos de selección casi 6.000 personas: “La ciudadanía comenzaba a percibir en esta legislatura un mayor movimiento, y con esta medida damos un salto cualitativo”. Conviene recordar que, al margen de lo hoy anunciado, ya a principios de 2019 tendrán lugar los exámenes de la OPE de personal técnico para hacer frente al fraude fiscal, provista con 35 plazas, y que en 2017 tuvieron lugar los exámenes correspondientes a la de bomberos y bomberas, con 25 plazas.

El diseño de la nueva Diputación

De cualquier manera, el Diputado ha indicado que aún queda “mucho por hacer”, citando como reto “el diseño en profundidad de la estructura y la organización de la nueva Diputación, porque la actual fue pensada en los 80”.  “Una vez realizada esta gran OPE, el siguiente paso será dibujar cómo debe ser la institución del futuro, para dar respuesta a una sociedad y un mundo que cambian constantemente y a gran velocidad. Este es uno de los retos más importantes que tenemos como sociedad en Gipuzkoa”, ha destacado, adelantando que la Diputación ya tiene contemplado este proyecto dentro de Etorkizuna Eraikiz.