"José María Setién deja una profunda huella en nuestro pueblo

El diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, ha mostrado hoy su “pesar y dolor” al conocer la noticia del fallecimiento del Obispo Emérito de San Sebastián José María Setién Alberro (Hernani, 1928). “Se ha ido un referente ético e intelectual de primer orden. La aportación que realizó como sacerdote a la sociedad vasca fue de enorme alcance y riqueza, y deja una profunda huella en nuestro pueblo”, ha afirmado el representante foral, destacando a su vez el “trabajo incansable” realizado por Setién “en favor de la convivencia y de una sociedad más justa. Se va un líder social y espiritual”.

            Obispo de San Sebastián desde el 17 de febrero de 1979 al 13 de enero de 2000, el 23 de diciembre de 2003 recibió de manos de la Diputación Foral de Gipuzkoa la Medalla de Oro del territorio, por su trabajo en pro de la verdad y los derechos humanos. También recibieron la distinción aquel año el periodista donostiarra Iñaki Gabilondo y el empresario y euskaltzale oñatiarra Juan Celaya.

El Diputado General ha hecho llegar sus condolencias a la familia y amigas y amigos de Setién, así como a la Iglesia de Gipuzkoa. “En su actividad vital, hizo suyas las preocupaciones, los problemas y la realidad de la sociedad de Gipuzkoa y de Euskadi, y como máximo representante de una Iglesia que es parte del pueblo, mostró su cercanía hacia las heridas y el dolor de éste toda su vida. Dedicó su trabajo, su capacidad de reflexión y su acción a ayudar a hacer frente a esos problemas”, ha recordado Olano. “Su elección fue posicionarse cerca de las inquietudes sociales, económicas, políticas y culturales de la sociedad”, ha añadido. 

El Diputado General ha subrayado especialmente la actitud “tan firme como  reflexionada” demostrada por Setién ante “todas las vulneraciones de los derechos humanos” y en favor de “una solución de alcance” para superar la violencia, que le llevó a recibir “muchos insultos y críticas injustamente”. Por otra parte, según ha recordado Olano, puso en marcha iniciativas innovadoras para abordar distintas realidades dolorosas que ha sufrido el territorio de Gipuzkoa, actuando siempre “para ayudar a los colectivos más débiles y vulnerables, y garantizar su dignidad”.