625.000 euros en 2017 para reforzar el ecosistema de emprendizaje de Gipuzkoa
625.000 euros en 2017 para reforzar el ecosistema de emprendizaje de Gipuzkoa
La Diputación impulsará la puesta en marcha de nuevas empresas en sectores de futuro a través de BIC Gipuzkoa
El Consejo de Gobierno ha aprobado destinar este año 625.000 euros para reforzar el ecosistema de emprendizaje de Gipuzkoa. Con ese fin, otorgará a Business Innovation Center de Gipuzkoa, BIC Gipuzkoa, una subvención por dicho importe para el desarrollo de actividades de apoyo al emprendizaje avanzado y al intra-emprendimiento; actividades con el Centro de Innovación y Desarrollo Empresarial Saiolan de Arrasate; y para la puesta en marcha de nuevas iniciativas de apoyo al emprendimiento alineadas con los sectores estratégicos de Gipuzkoa, como la salud y las biociencias, la electromovilidad y el almacenamiento de energía, el sector gastroalimentario y la fabricación avanzada.
El año pasado, BIC Gipuzkoa apoyó 57 proyectos de emprendimiento. 35 se acogieron al programa Ekintzaile-Txekintek de apoyo para nuevos proyectos empresariales, y otros 22 al programa Barnetekin-Ekintzaile del apoyo al intraemprendimiento en las empresas. Las ayudas concedidas durante el año 2016 en el marco de estos dos programas ascendieron a 1.274.550 euros. Asimismo, BIP Gipuzkoa apoyó el lanzamiento de 27 Start Ups innovadoras y/o de base tecnológica que desarrollan su actividad en los sectores biosanitario (40%), fabricación avanzada (34%), ingenierías y tecnologías digitales (19%) y energía (7%).
A lo largo de toda su trayectoria, son 302 proyectos de emprendimiento –mediante el programa Ekintzaile/Txekintek–, y 194 iniciativas de intraemprendimiento –a través del programa Barnetekin/Ekintzaile– los que este Centro ha llevado a cabo en total. En su conjunto, el 80% de las iniciativas apoyadas por BIC Gipuzkoa que finalmente terminaron en el mercado siguen activas en la actualidad, un balance que el portavoz foral Imanol Lasa ha calificado de “exitoso”.
Lasa ha destacado que BIC Gipuzkoa es un activo importante dentro del ecosistema de impulso a los y las emprendedoras en el territorio, y que con este respaldo económico, la Diputación quiere seguir contribuyendo a construir “una Gipuzkoa que apuesta por la sostenibilidad, impulsando políticas que aseguren la competitividad y empujen al crecimiento de la industria. Para ello, es necesario apoyar a personas y agentes con iniciativa para la creación de empresas eficaces y eficientes, que generen nuevos puestos de trabajo, especialmente en los sectores que más van a crecer, basados en las nuevas tecnologías”.
BIC Gipuzkoa fue constituida el 13 de diciembre de 1993, como Centro de Empresas Innovación (BIC) y desempeña un papel fundamental en la red de emprendizaje en Gipuzkoa. Desarrolla actuaciones dirigidas a las personas emprendedoras y a las pymes apoyando la creación de Nuevas Empresas Innovadoras y/o de Base Tecnológica (NEBTs), facilitándoles herramientas y servicios orientados a la competitividad, la cooperación empresarial, el intercambio de experiencias y el acceso de fuentes de financiación y de información, así como, el intraemprendizaje corporativo.
También promueve la cultura emprendedora, bien a través de la formación; bien a través del reconocimiento y valorización social –premios, etc.-; bien a través de acciones experimentales dirigidas al ámbito educativo, tanto universitario como no-universitario. Desarrolla planes de emprendimiento en los sectores estratégicos para el desarrollo territorial de Gipuzkoa, detectando “nuevas oportunidades”, analizando su viabilidad, y respaldando nuevos proyectos empresariales de valor añadido y de rápido crecimiento y/o de base tecnológica e intraemprendimiento. “Hay que poner en valor la labor de acompañamiento que realizan entidades como BIC Gipuzkoa, desde los primeros pasos de los proyectos, a veces los más complicados, hasta que se asientan y dan fruto”, ha señalado Lasa.
El portavoz foral ha valorado positivamente la evolución de la economía en el territorio, recordando que el PIB ha crecido un 2’7% en el segundo trimestre de este año respecto al pasado, y que la producción industrial registró por primera vez un balance acumulado positivo este año tras los buenos datos de julio. En cualquier caso, ha recalcado que queda “mucho por hacer” en la creación de puestos de trabajo de calidad, y para ello ha considerado de vital importancia que las tres Diputaciones Forales y el Gobierno Vasco continúen fortaleciendo las estructuras de apoyo al emprendimiento innovador y tecnológicamente avanzado en Euskadi, para poder atender así nuevos proyectos de NEBTs.
Cesión de vehículo
Por otro lado, el Consejo ha aprobado ceder a la Asociación Hondarribia-Katsikas Errefuxiatuen aldeko Boluntario Elkartea, a solicitud de la misma, un vehículo del departamento de Políticas Sociales que se encuentra en desuso, para destinarlo al campamento de refugiados sito en Polikastro, en Grecia. El vehículo, un Renault Megane con matrícula 3748 CYC, permitirá realizar el traslado de personas a centros sanitarios y el reparto de comida, ropa y enseres entre las personas refugiadas. Lasa ha recordado que ya anteriormente se cedieron otros dos vehículos a la ONG Zaporeak, premio Renne Cassin del Gobierno Vasco, que reparte en Grecia más de 1.000 raciones de comida de media sobre el terreno, y ha destacado “el ejemplo de solidaridad” que están dando las asociaciones y la sociedad civil de Gipuzkoa “ante este drama”.
Kolore Guztiak
Por último, el Consejo ha decidido destinar a la Asociación Intercultural Kolore Guztiak una inversión adicional de 6.180 euros. La Diputación mantiene desde 2009 un convenio de colaboración con esta asociación para la prestación de servicios destinados a jóvenes que se encuentren en situación de dificultad social, proporcionándole pisos de emancipación y programas de acompañamiento en la inserción social. Dado el aumento de solicitudes de acceso a este programa, se va a reforzar el plantel de educadores sociales, acorde con el Plan de Inserción Elkar-Ekin, que señala como uno de los objetivos la adaptación paulatina de los convenios y de los contratos actuales con las entidades sociales para atender las necesidades derivadas de la exclusión social.
1975