Arantxa Urretabizkaia recibirá el premio Anton Abbadia 2019
Arantxa Urretabizkaia recibirá el premio Anton Abbadia 2019
La institución foral reconoce, entre otros méritos, su labor a favor del euskera.
La Diputación Foral de Gipuzkoa ha concedido a la escritora donostiarra Arantxa Urretabizkaia el premio Anton Abbadia Saria 2019, después de que así lo haya decidido el jurado por unanimidad. Como es tradición, la premiada recibirá el premio Abbadia Saria en vísperas del Día Internacional del Euskara, el próximo 2 de diciembre, en un acto que se llevará a cabo en el Palacio foral. “Urretabizkaia lleva toda una vida trabajando a favor del euskera, incluso en las coyunturas más difíciles, y representa a una generación que consiguió normalizar el uso del euskara batua y que trajo nuestra lengua a la edad moderna. Además, ha sido pionera en el cambio del imaginario sobre la mujer en la literatura vasca”, ha explicado Eider Mendoza, portavoz de la Diputación.
La responsable foral ha comparecido hoy ante los medios de comunicación para dar cuenta de las decisiones adoptadas en el Consejo de Gobierno de hoy. Urretabizkaia ha destacado en diferentes disciplinas de creación literaria, y cuenta con obras notables como Zergatik, Panpox (1979), Koaderno Gorria (1998), 3 Mariak (2010), Zuri-beltzeko argazkiak (2014) o Bidean ikasia (2016), trabajos todos ellos que han sido traducidos al castellano y, en algunos casos, también a otras lenguas. Como cada año, la premiada recibirá una obra creada por un o una joven artista del territorio. En este caso, la autora es la artista azkoitiarra Udane Juaristi (1985), que creará una obra especialmente para la ocasión. Juaristi es licenciada en Bellas Artes en Bilbao y Paris (en la escuela nacional superior de Bellas Artes).
El premio Anton Abbadia fue creado por la Diputación Foral de Gipuzkoa en 1996, con el objetivo de premiar a aquellas personas y asociaciones que trabajan a favor de la normalización del euskera. “Existen otros premios en torno al euskera, pero la mayoría se centran en otros sectores y van dirigidos a personas expertas en la materia. En todo caso, los premios Anton Abbadia quieren cubrir un espacio mayor, ya que quiere ser un reconocimiento a aquellas personas y sociedades de a pie que revitalizan, socializan y extienden el uso del euskera”, ha explicado Mendoza. “Recordando a Anton Abbadia, se pretende que los premios sean un lugar de encuentro para los euskaltzales: con la entrega de este premio queremos fortalecer y renovar las relaciones de todas aquellas personas que trabajan en torno al euskera, en un ambiente cercano, cálido y alegre”, ha añadido.
Residencias de Eibar y Pasaia
Por otra parte, el Consejo de Gobierno también ha dado luz verde a los convenios a suscribir con los ayuntamientos de Eibar y Pasaia para la incorporación a Kabia de la residencia San Andrés de Eibar y la residencia y el centro de día de Pasai San Pedro. Una vez se rubriquen estos dos acuerdos, las dos infraestructuras se integrarán en el organismo autónomo foral a partir del 1 de enero de 2020. La residencia de Eibar cuenta con 120 plazas, y la de Pasaia con 41 plazas más otras 15 plazas en el centro de día.
Hasta la fecha, se han integrado en Kabia las residencias de Azkoitia, Elgoibar, Villabona, Zumaia, Lasarte, Andoain, Bergara, Ordizia, Arrasate y Tolosa. Cuando se materialice la decisión aprobada hoy tan solo quedarán las residencias de Irun y Hernani, que está previsto que se incorporen en el primer semestre de 2020. Cuando se complete el proceso, Kabia gestionará un total de 16 residencias: 1.505 plazas (1.336 plazas en residencias y 169 en centros de día), tendrá 299 personas trabajadoras (116 funcionarios y 183 contratadas) y, además, prestan servicios 18 empresas con 949 trabajadores.
“El modelo consolidado por Kabia va a convertirse en un referente en la atención residencial a las personas mayores en Gipuzkoa, y será sostenible y de calidad”, ha remarcado la portavoz foral. Según ha destacado, el modelo de Kabia ha sido definido “entre todos y todas”, buscando el acuerdo de la Diputación con las administraciones municipales y llevando a cabo para ello decenas de reuniones. “Cobijar bajo la gestión de la Diputación a 16 residencias municipales, cada una con sus particularidades, está siendo un reto de calado, pero poco a poco estamos cumpliendo con los compromisos adoptados, con responsabilidad y realismo”, ha subrayado Mendoza.
Adinberri
Por último, el Consejo de Gobierno ha aprobado la formulación de la Modificación de las Normas Subsidiarias de Planeamiento Municipal de Pasaia para definir el nuevo centro de referencia Adinberri, paso importante de cara a acometer la construcción de la infraestructura. En la práctica, se trata del primer paso para definir la normativa urbanística de la parcela en la que se situará el centro, que pasará a tener calificación global de Sistema General de Equipamiento Comunitario Sanitario Asistencial. De este modo, se da inicio a la tramitación de la misma, que luego tendrá que ser aprobada por el Ayuntamiento de Pasaia.
El centro Adinberri, que se ubicará en la parcela de Hospitalillo, aunará, por una parte, servicios de atención innovadores para personas mayores y, por la otra, iniciativas de investigación, documentación, preparación y orientación sobre envejecimiento. De este modo, se consolida la estabilidad del proceso de innovación social y tecnológico, que generará riqueza y empleo de calidad en Gipuzkoa. La nueva infraestructura, además, mejorará la cobertura de servicios para mayores destinados a Oarsoaldea y contribuirá a la regeneración de Pasaialdea.
Las instalaciones contarán con una superficie de 31.321 m2, y tendrán 120 plazas de residencia, 30 plazas en centros de día y 18 apartamentos tutelados. La inversión total prevista es de 32,2 millones de euros. En 2020, arrancarán las obras del aparcamiento cubierto del Hospitalillo, fase previa de la construcción del centro Adinberri. El proyecto de Norma Foral que recoge los presupuestos del año que viene prevé dotar con un total de 7,6 millones de euros este proyecto foral, de los que un millón está destinado a la construcción del edificio que albergará el centro de referencia.
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