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Gipuzkoa apuesta por dar “un salto cualitativo” en la gestión forestal sostenible con Basotik

La Diputación Foral ha aprobado la creación de la Fundación, que se se hará cargo de los bosques de aquellos propietarios y propietarias que decidan cederlos a cambio de una contraprestación económica.

Jabier Larrañaga, Markel Olano eta Arantxa Ariztimuño

La Diputación Foral ha dado luz verde a la creación de Basotik, una fundación pública que nace con el cometido de agrupar un volumen relevante de masa forestal que permita “dar un salto cualitativo” hacia “la gestión sostenible de los bosques de Gipuzkoa, contribuyendo al desarrollo integral del territorio y a la gestión ecológica del mismo, y persiguiendo en última instancia la defensa del medio ambiente y del patrimonio forestal, y el desarrollo del sector primario”. Así lo ha destacado hoy el diputado general Markel Olano en la presentación de la iniciativa, acompañado por el diputado de Promoción Económica, Turismo y Medio Rural Jabier Larrañaga y la directora de Montes y Medio Natural Arantxa Ariztimuño. “Nuestros bosques son un patrimonio esencial cuyo futuro debemos garantizar. Para eso, en un momento de inflexión como el que vivimos, debemos tomar medidas ambiciosas, innovadoras, y con visión de largo plazo como ésta”, ha afirmado.

          La constitución de la fundación, participada al 100% por la Diputación, y sus estatutos se aprobaron en el Consejo de Gobierno de la pasada semana, junto a su dotación económica inicial, que supondrá una inversión foral de 2 millones de euros este año, y de 8 millones en total durante los próximos cinco años. Basotik aspira a agrupar bajo su gestión en torno a 40.000 hectáreas de bosque. Supondrá por tanto una alternativa atractiva para los y las titulares de las explotaciones forestales frente a la gestión individual, ya que les permitirá delegar su cuidado y gestión en la Fundación, y anticipar y garantizar el cobro del valor generado a partir de una gestión forestal activa y diversificada.

Gipuzkoa es un territorio con una notable presencia de bosques, que alcanzan el 61,5% de su superficie. Se trata del mayor porcentaje de la CAV, y muy superior a la media europea, del 40%. Sin embargo, Olano ha explicado que “existen distintos factores que pueden poner en riesgo ese patrimonio, que nos han llevado a poner en marcha Basotik”. Entre ellos está el pequeño tamaño de las explotaciones, dado que el 79% de los bosques de Gipuzkoa es de titularidad privada, con un total de 9.700 explotaciones cuya extensión no supera las 20 hectáreas en el 97% de los casos. La superficie media de la propiedad forestal en Euskadi es de 3-5ha, en contraposición con países nórdicos como Finlandia en el que la media está en 30 ha. También hay que tener en cuenta la elevada edad de los y las propietarias, el 60% mayores de 60 años, y la falta de relevo generacional fruto del progresivo alejamiento de la sociedad respecto al medio rural.

A ello hay que sumar la reducida rentabilidad de muchas de las explotaciones, que se materializa además a muy largo plazo, y el impacto de la banda marrón, que ha afectado a más del 40% de la superficie de pino radiata plantada, suponiendo esta especie el 30% de la superficie forestal total del territorio. Todo ello deriva en un riesgo de abandono que la Diputación quiere atajar, asegurando una gestión adecuada de la masa forestal de Gipuzkoa, bien a través de la gestión integral de la superficie, especialmente la no gestionada, bien favoreciendo mecanismos para mejorar la rentabilidad de las explotaciones gestionadas por sus propietarios.

          Así, Basotik nace con el objetivo fundacional de garantizar la sostenibilidad del patrimonio forestal de Gipuzkoa, ayudando a la mejora de la calidad del paisaje rural y a la conservación del medio ambiente, y contribuyendo a los objetivos de descarbonización del territorio maximizando la absorción de las emisiones de CO2. Para ello involucrará y sensibilizará a la sociedad guipuzcoana y a los agentes económicos y sociales sobre la conveniencia de asegurar una gestión sostenible de la masa forestal, facilitando un entorno y paisaje rural atractivo y de alto valor ecológico, y pondrá en valor la contribución que hacen los y las propietarios forestales al conjunto de la sociedad. “Queremos seguir asumiendo desde la Diputación un papel de liderazgo compartido en la construcción de una Gipuzkoa más verde y sostenible, acorde con los desafíos globales que afrontamos”, ha asegurado el diputado general.

Olano ha señalado que con la creación de Basotik la Diputación apuesta por desarrollar, “también en este ámbito, el modelo de los países europeos más avanzados”, entre los que ha citado a “Finlandia, Suecia o Alemania”. “Todos ellos cuentan con estructuras de gestión colectiva del patrimonio forestal, algunas impulsadas desde el ámbito privado y otras desde el público, que han permitido mejorar la competitividad y garantizar la existencia de un patrimonio forestal de gran valor. La concentración de superficie gestionada de forma homogénea se ha mostrado como una fórmula adecuada para garantizar una política forestal avanzada y sostenible medioambiental, social y económicamente, que queremos aplicar también en Gipuzkoa”. Ha subrayado el carácter “pionero” de la iniciativa a nivel europeo, ya que “no conocemos otra institución pública que haya puesto en marcha una entidad pública para que abarque la gestión de bosques privados”.

Actuaciones

Según ha detallado Jabier Larrañaga, los bosques son “la columna vertebral de nuestro medio ambiente, y van a ser imprescindibles para mitigar el cambio climático y para transitar a modelos económicos más sostenibles y basados en recursos renovables, reciclables y biodegradables, apostando por la bioeconomía”, por lo que entre las actuaciones que llevará a cabo Basotik estará la gestión y comercialización de créditos de compensación de carbono.  Y es que, además del CO2 que absorben y retienen los árboles, hay que tener en cuenta “el que se almacena y sustituye con productos provenientes de madera que evitan el uso de otro tipo de materiales de origen fósil como el plástico, el acero o el aluminio, reduciendo la huella medioambiental. Sin olvidar la importancia que tiene en el momento actual la biomasa como recurso energético renovable, de cara a su uso en la calefacción de edificios, etc”.

          Además, la Fundación promocionará, divulgará e informará del patrimonio forestal, fomentará las actividades de ocio, voluntariado y turismo ligado a la naturaleza y las actividades lúdicas en armonía con el medio natural, y gestionará y pondrá en valor los servicios ecosistémicos, es decir, aquellos que un ecosistema, en este caso los bosques, aporta a la sociedad y que mejoran la salud, la economía y la calidad de vida de las personas. “El rol de los bosques es fundamental para prevenir catástrofes como incendios o inundaciones; evitar la erosión, algo muy relevante en Gipuzkoa, porque somos un territorio especialmente vulnerable a este fenómeno por nuestro relieve montañoso y por el nivel de precipitaciones; favorecer la retención y depuración del agua; los usos recreativos y de ocio; el paisaje; el mantenimiento de la biodiversidad de fauna y flora; la polinización…”.

          Basotik se erige así en una alternativa de interés para propietarios y propietarias de explotaciones forestales no gestionadas, gestionadas de forma no rentable o con problemas de sucesión, y para explotaciones rentables, pero que tengan interés en formar parte de una entidad de mayor dimensión, pudiendo hacerse cargo también de bosques de titularidad pública. Se encargará de la gestión integral de los mismos -  plantación, limpieza, transformación, comercialización de la madera y de los productos forestales…-.

          En ese sentido, ha subrayado que la Fundación será un agente clave para “fortalecer y vertebrar un sector que genera más de 6.000 puestos de trabajo en Gipuzkoa”, y “para hacerlo más competitivo, profundizando en las dinámicas de colaboración con propietarios y propietarias”. Y es que entre sus funciones estarán también las de impulsar la formación y el emprendimiento; desarrollar proyectos de cooperación nacional y transnacional; participar en la elaboración de políticas y planes de organización sectorial; planificar, coordinar, desarrollar, implantar y experimentar soluciones tecnológicas y organizativas especializadas; promocionar el uso de la madera y asegurar el suministro de este producto kilómetro 0; fomentar y elaborar planes técnicos de gestión forestal sostenible; y prestar servicios de asesoramiento técnico, económico, financiero, tramitación de ayudas y gestión a las personas propietarias.

  

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