El Departamento de Cultura, Cooperación y Juventud se adhiere a la ‘Alianza País Pobreza Infantil Cero’

Con más de una cuarta parte de los niños y niñas en España en riesgo de pobreza, la ‘Alianza País Pobreza Infantil Cero’, lanzada en 2021 por el Alto Comisionado contra la Pobreza Infantil del Gobierno de España, busca romper el círculo de la pobreza infantil en el país, alineando esfuerzos y facilitando la coordinación de todos los actores implicados para responder a los retos planteados, impulsando la innovación, movilizando nuevos recursos y, por último, dando visibilidad a la lucha contra la pobreza infantil.

Para poner fin a esta situación, el alto comisionado contra la Pobreza Infantil Ernesto Gasco, y el diputado de Cultura, Cooperación y Juventud Harkaitz Millan, han firmado un acuerdo de adhesión con el objetivo de garantizar una educación inclusiva y de calidad; impulsando el logro educativo, potenciando el talento y rompiendo la brecha digital; y de generar entornos saludables, positivos y seguros para niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad, garantizando una nutrición saludable y equilibrada, promoviendo un entorno seguro y protector y fomentando la participación con equidad.

En su intervención, el diputado de Cultura, Cooperación y Juventud, Harkaitz Millan, ha señalado que “es importante impulsar el trabajo que se viene haciendo desde la Dirección de Juventud y la Dirección de Cooperación de la Diputación, al objetivo de promover la prevención de las desigualdades en la infancia y la juventud guipuzcoana, y cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible 1, 4, 5 y 10: combatir la pobreza, impulsar la educación de calidad, trabajar por la igualdad de género y reducir las desigualdades sociales”.

Por su parte, el alto comsionado contra la Pobreza Infantil, Ernesto Gasco, ha declarado que “la lucha contra la pobreza infantil solo se puede abordar en alianza con todos los niveles de la administración pública, las empresas, las entidades del tercer sector y la sociedad civil. Esta es la mejor manera de alcanzar el futuro que queremos, un país en el que la infancia tenga la mismas oportunidades independientemente de su origen. Para ello, no podemos subestimar el potencial transformador que ofrece la participación plena en cultura, algo que debemos impulsar desde la instituciones”.