Colaboración, solidaridad y apertura al mundo, ejes para el escenario post pandemia

Como viene siendo habitual durante los últimos años, la Diputación Foral de Gipuzkoa ha dado hoy arranque al nuevo ciclo político con la celebración del curso de verano de Etorkizuna Eraikiz, bajo el título ‘Escenarios y desafíos emergentes tras la pandemia. pensamiento prospectivo y visión de futuro’. En él, el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, ha apostado por la colaboración, la solidaridad y la apertura al mundo como ejes de la estrategia foral para luchar contra la crisis y el escenario posterior al COVID-19. El responsable foral ha reiterado una vez más la apuesta de la institución por sus proyectos estratégicos de futuro, tales como MUBIL o Adinberri, y ha explicado que en el nuevo ciclo político trabajará para conectarlos con las experiencias más avanzadas en su sector a nivel mundial.

          El curso de verano, celebrado en el Palacio Miramar de Donostia, se ha convertido en la práctica en un ejercicio compartido de reflexión y debate sobre el futuro cercano, condicionado siempre por el impacto de la pandemia del COVID-19 y sus consecuencias. En el encuentro han participado, junto a Olano, la rectora de la UPV/EHU, Nekane Balluerka; el secretario de Estado para la España Global, Manuel Muñiz; y el diputado foral de Hacienda y Finanzas, Jabier Larrañaga. Al acto han asistido, asimismo, el diputado foral de Medio Ambiente y Obras Hidráulicas, José Ignacio Asensio; el diputado foral de Promoción Económica, Turismo y Medio Rural, Imanol Lasa; la diputada foral de Proyectos Estratégicos, Ainhoa Aizpuru; y los codirectores del propio curso de verano, Xabier Barandiaran y Alfonso Unceta.

          Olano ha dado comienzo a su intervención con un sentido mensaje de solidaridad hacia las víctimas de la pandemia del COVID-19, tanto para quienes han sufrido la enfermedad directamente como para quienes se han visto perjudicadas por las consecuencias sociales o económicas de la misma. Asimismo, ha reivindicado “hoy más que nunca como valores la razón, la democracia, los derechos humanos y la solidaridad”, frente a quienes están aprovechando la pandemia para “atacar la convivencia democrática y el progreso”. “A la hora de hacer frente a las consecuencias de la situación que vivimos, es indispensable responder como sociedad, basando nuestra actividad en un debate científico y de ideas libre y constructivo”, ha defendido.

          En este contexto, ha subrayado la importancia de encuentros como el curso de verano organizado por Etorkizuna Eraikiz, ya que “este tipo de talleres son el modo que tiene una sociedad moderna para encontrar soluciones tanto a retos convencionales como nuevos, abierta al mundo y a través de la ciencia, el conocimiento y la colaboración”. El propio programa foral Etorkizuna Eraikiz, puesto en marcha por la Diputación en 2016, también camina en la misma dirección: “En colaboración con la sociedad civil, Etorkizuna Eraikiz persigue identificar los principales desafíos del territorio y dar cauce a políticas públicas que den una respuesta colectiva a esos retos”.

          Durante sus cinco años de trayectoria, el programa foral ha hecho de la colaboración y la experimentación sus principales señas de identidad. Fruto de ello, la Diputación ha podido incorporar a sus políticas públicas las conclusiones aquí obtenidas, y ha puesto en marcha estratégicas compartidas con los agentes económicos relevantes de diferentes sectores. “Se trata de las estrategias de especialización inteligente en las áreas de ciberseguridad, de producción audiovisual, de gastronomía digital, de electromovilidad, de  envejecimiento saludable, y de cambio climático y economía circular, pero también en un ámbito tan crucial como el de la inserción laboral de las personas en riesgo de exclusión”, ha destacado Olano.

          Según el diputado general, estos proyectos cobran aún relevancia en el escenario actual de pandemia, y marcan el camino de superación de la crisis. “Social, verde y digital son las características para la salida de la crisis que defendemos: social, porque no podemos dejar a nadie atrás; verde, con el cuidado del medio ambiente como base; y digital, para que sigamos teniendo una empresa fuerte y vanguardista”, ha remarcado. Etorkizuna Eraikiz y los proyectos estratégicos de futuro gestados en su seno reman en esa dirección, “coincidiendo plenamente con las directrices establecidas por Europa para la salida de la crisis del COVID-19”.

 

Solidaridad y apertura al mundo

De cara a esa superación y escenario posterior a la crisis, Olano ha situado la solidaridad y la apertura al mundo como ejes fundamentales de la Gipuzkoa que la Diputación busca construir. Citando a Jose Maria Arizmendiarreta, padre del cooperativismo vasco, ha situado la solidaridad como “palanca que multiplica nuestras fuerzas”, y ha explicado que Etorkizuna Eraikiz es “un ejercicio para intentar canalizar esa colaboración”. Por ello, ha reiterado la invitación a agentes sociales y económicas del territorio para que “sumen sus fuerzas a ese trabajo en equipo”. “No es tiempo de enfrentamiento ni de enfangarnos en luchas estériles, es tiempo de unir fuerzas”, ha defendido.

          Respecto al segundo valor, el de la apertura al mundo, ha vuelto a poner sobre la mesa de los proyectos estratégicos impulsados por Etorkizuna Eraikiz, explicando que todos ellos nacen con la voluntad y la determinación de convertirse en espacios de referencia internacional, “que conecten con otros espacios de co-creación, de conocimiento avanzado y de innovación”. “Se trata de una premisa fundamental de Etorkizuna Eraikiz, que engarza además con la tradición histórica de Gipuzkoa como territorio abierto a Europa y al mundo”, ha añadido. Por ello, ha señalado que la Diputación apostará “más que nunca” por la internacionalización, recordando que la propia pandemia ha dejado en evidencia que “los problemas a los que nos enfrentamos son de escala global”. “Es indispensable responder desde lo local, pero para conseguir efectividad necesitamos compartir estas respuestas con nuestro entorno y con el resto del mundo”, ha manifestado. 

 

Manuel Muñiz

El secretario de Estado para la España Global Manuel Muñiz, por su parte, se ha referido al plan de recuperación de la pandemia de la Unión Europea, subrayando, al igual que ha hecho el diputado general, las prioridades marcados por las instituciones comunitarias: la digitalización, la lucha contra el cambio climático (economía sostenible y circular) y la inclusión social. Asimismo, ha considerado que la aportación a la resiliencia será otro de las características que querrá impulsar Europa: la propia digitalización, la internacionalización, la escalabilidad… “Todo aquello que te haga responder mejor a una crisis como la que hemos vivido. Creo que, si lo hacemos bien, estamos ante una grandísima oportunidad para dar al país el empujón que necesita para progresar”, ha remarcado.

          Muñiz ha considerado que, en el contexto actual, la aprobación de los presupuestos del Estado y la elaboración del plan de inversiones ligado a los fondos europeos son dos líneas de trabajo que van de la mano, y ha opinado que la distribución de estos recursos conllevará un ejercicio “de gran complejidad”. “Se está abriendo un proceso, donde desde la Presidencia del Gobierno (del Estado) se vertebrará un diálogo con las comunidades autónomas para entender los proyectos que se van a juzgar, siempre en base a las directrices establecidas por Europa y atendiendo a la capacidad tractora de cada iniciativa. Luego, claro está, los proyectos tendrán que volver a pasar el propio escrutinio de las instituciones comunitarias”, ha considerado.

          El secretario de Estado ha recordado que todavía faltan muchos detalles y “más especificidad” acerca del contenido de los fondos europeos. “Sabemos las líneas generales por las prioridades de agenda de Europa, conocemos de fondos anteriores cuestiones de forma, también que los proyectos van a tener que presentar calendario e hitos tasables… Hay una serie de nociones, pero nos faltan todavía muchos detalles”, ha explicado. A su juicio, se trata del “gran tema” que tiene ahora mismo entre manos la Comisión Europea.

 

Jabier Larrañaga

El diputado foral de Hacienda y Finanzas Jabier Larrañaga, mientras tanto, ha considerado que los fondos europeos refuerzan el proyecto comunitario. “Se trata de una herramienta política muy importante, pero el reto está en habilitar proyectos que seamos capaces de ejecutarlos”, ha advertido. “Una parte de riesgo sería que vayamos a una distribución, por ejemplo, por cuota geográfica, lo que podría llevar a no aprovechar suficientemente estos recursos por carecer de capacidad de absorción”, ha proseguido. “Lo fundamental es cómo se hace la asignación, que todavía no conocemos. La cuestión es poner sobre la mesa una serie de proyectos serios, competitivos y ejecutables”, ha subrayado.

          Asimismo, el responsable foral ha destacado la “oportunidad” que supondrán estos fondos “para acercarnos más Europa”, tanto desde el punto de vista de la administración como por parte del tejido empresarial. “Las compañías grandes quizás llevan años haciéndolo, pero hay otra parte del tejido productivo que se incorporará ahora al lenguaje y a los mecanismos que conlleva la relación con las instituciones comunitarias. Y creo que, desde este punto de vista, también es una noticia positiva y supondrá todo un reto”, ha manifestado.