Seis lugares únicos de Gipuzkoa acogerán nuevas sesiones de Dantz Point

La primera cita se llevará a cabo el sábado a las 19:00 en el convento de las Brígidas de Lasarte-Oria, de la mano de Paolo Solo y Furonia.

Además, en esta edición Dantz Point recupera su presencialidad tras dos años de pandemia.

Una de las sesiones de esta edición se celebrará en uno de los espacios más emblemáticos de Gipuzkoa,  en las minas de Arditurri en Oiartzun.

Un año más vuelven los Dantz Point a Gipuzkoa, un evento que fusiona el patrimonio con la música electrónica y de vanguardia, con al apoyo del Departamento de Cultura de la Diputación Foral de Gipuzkoa, que recupera la presencialidad tras dos años de pandemia. En esta edición serán seis los eventos que se podrán disfrutar en el territorio de forma presencial y en formato digital.

A la rueda de prensa de la presentación de Dantz Point 2022 han acudido Harkaitz Millan, diputado de Cultura; Jokin Telleria, responsable de Dantz; Mertxe Urteaga, ténica arqueóloga del Departamento de Cultura; y los DJ lasarteoriatarras Iker Furones (Paolo Solo) y Paula Cornejo (Furonia), quienes serán los encargados de dar inicio al primer encuentro Dantz Point de esta edicion en Lasarte-Oria.

Los Dantz Point son acciones artísticas, sobre todo sesiones de música electrónica y de vanguardia, en lugares emblemáticos y con dos protagonistas: la música y el patrimonio. Las sesiones se graban y se emiten en diversas plataformas con alcance local, estatal e internacional.

El inicio del programa se llevará a cabo de la mano de Paolo Solo y de Furonia. Este primer Dantz Point se realizará este sábado 30 de abril desde el convento de las Brígidas de Lasarte-Oria a las 19:00 horas. Después se anunciarán las fechas de los próximos eventos repartidos por diferentes espacios emblemáticos de Gipuzkoa.

Los espacios de este año son Zumardi Txikia de Tolosa, las minas de Arditurri en Oiartzun, el convento de las Brígidas de Lasarte-Oria o las terrazas del Kursaal de San Sebastián. También habrá eventos en Irun y Hondarribia, en espacios aún sin concretar.

Sobre el proyecto, el diputado de Cultura Harkaitz Millan ha señalado que “gracias a Dantz Point conseguimos mostrar y dar a conocer la infinidad de parajes y artistas contemporáneos ‘ocultos’ que esconde Gipuzkoa. Se fusionan así el patrimonio y la creación de vanguardia”. Asimismo, Millan ha añadido que “se antoja una como una cita indispensable para redescubrir, divulgar y potenciar los espacios más especiales de Gipuzkoa, a nivel local e internacional. Además, disfrutando de la música más vanguardista y electrónica, ya que es la que mejor se amolda a los diferentes lugares, debido a su adaptabilidad, flexibilidad y apertura de estilos”.

El proyecto Dantz nació en 2017, para después en 2019, iniciar el proyecto Dantz Point, que hace dos ediciones obtuvo un premio internacional de la mano de Dance Television. “Esto sirvió para impulsar el proyecto y poner a Gipuzkoa en el mapa”, ha declarado Telleria. Además, Dantz Point ha obtenido recientemente una ayuda de 200.000 euros de los fondos europeos para el impulso del proyecto Dantz Point Europe en cinco países con el objetivo común de acercar a las nuevas generaciones el patrimonio cultural de la Unión Europea a través de formas y contenidos innovadores, en esta caso, la música.

El año pasado, espacios como el caserío Gomestio de Arrasate, el museo Chillida-Leku de San Sebastián, el embalse de Urkulu en Aretxabaleta, la ermita de la Antigua en Zumarraga, el caserío museo Igartubeiti de Ezkio-Itsaso, el puerto de Mutriku o la industria de Urretxu, fueron los escenarios para los diferentes Dantz Point que se llevaron a cabo. Los artistas que participaron fueron Dans, Essan, Loreak, Gela, Nikka, M4 y Divorce From New York, entre otros.

Minas de Arditurri en Oiartzun

El Departamento de Cultura de la Diputación Foral de Gipuzkoa ha querido destacar uno de los espacios emblemáticos en el que se celebrará una de las sesiones de Dantz Point en esta edición, las minas de Arditurri en Oiartzun. A este respecto, la técnica arqueóloga del Departamento de Cultura, Mertxe Urteaga, ha recalcado que “el espacio elegido para el concierto es un lugar que reúne una serie de condiciones extraordinarias”.

Las minas de Arditurri son un pequeño circo natural presidido por la impresionante mole granítica de las Peñas de Aia, con sus más de 800 metros de altura, y enmarcado en un paisaje minero sobresaliente. En el frente se abren los huecos dejados por los trabajos mineros que explotaron los filones de plomo, plata, cobre y hierro desde tiempos romanos. A la espalda, la planta de tratamiento de minerales en la que se trituraban las rocas para separar los diferentes componentes antes de llevarnos a la fundición. A un lado, el centro de interpretación del coto minero y al otro, las estrucutras de carga del ferrocarril que siguiendo el río, llegaba hasta el puerto de Pasaia. Además, las minas de Arditurri cuentan con una magnífica acústica que ya ha sido confirmada en anteriores ocasiones.