Culata

Para la elaboración de la culata se parte de madera generalmente de nogal aunque en ocasiones también de haya. Hasta hace algunas décadas se elegían y compraban árboles que se derribaban y secaban (lo que requería un largo período de tiempo) antes de su utilización. Actualmente se tiende a comprarlos a terceros incluso la culata terminada, en cuya fabricación (para escopetas, carabinas y antecarga) se ha especializado la empresa eibarresa José Mutiloa, S.A.

Los “kaxagiñak” o culateros, parten de una tabla que recortan a la media deseada, utilizando una sierra, según la pistola a fabricar. La pieza así obtenida la colocan en un tornillo de banco y la van rebajando empleando cuchillas de desbastar y cepillo hasta lograr las formas adecuadas.

La parte delantera de la caja, que soportará el cañón, se obtiene de la misma forma preparando un hueco en el que se ha de asentar esta parte del arma, en una fresadora. Para conseguirlo se utiliza como plantilla el propio cañón para terminar ajustándolo con gubia y formón.

Despiece de una pistolaDespiece de una pistola y descripción de algunos de sus componentes. Dibujo Julen Zabaleta.

Seguidamente se prepara la cavidad donde se coloca la platina con el mecanismo de disparo, para lo que utilizando la misma pieza, se marca su perfil sobre la madera y se realizan todos los rebajes necesarios para que encaje cada uno de los mecanismos. Para esto se utiliza la gubia y el formón, así como para obtener el agujero en el que se alojará el gatillo y el resto de las piezas del disparo. La operación final es el pulido manual de toda la superficie de la caja, hasta conseguir el acabado deseado para proceder al charolado o barnizado con objeto de dotar a las culatas de un brillo duradero que las haga más atractivas.

Despiece de una pistola y descripción de algunos de sus componentes. Dibujo Julen Zabaleta. En ocasiones el charolado o barnizado se sustituye por un primer baño de aceite de linaza. Tras su secado al aire libre (dos o tres días) se frota con un paño “para sacarle brillo”. Repetida la operación dos o tres veces se logra un color que resalta las características de la madera que presentan las culatas de las pistolas originales que se trata de reproducir.

La fabricación del mecanismo de disparo llamado platina, llave o chispa es complejo y de gran importancia en el funcionamiento del arma. Otras partes tampoco dejan de tener ciertas dificultades que con la experiencia en algunos casos, de otros especialistas, se consigue solucionar.