Valores que aporta la truficultura

Las aportaciones de la truficultura se pueden concretar en tres puntos:

Económicos

Promover la truficultura supone potenciar un producto de calidad, con mayor demanda que oferta, que contribuye a lograr una renta complementaria. En este momento, la producción obtenida se acerca a los 10kg/ha más que a los 20kg/ha previstos. Además lo mismo que ocurre con cualquier cultivo, siempre habrá años mejores y otros peores, en función de la climatología.

Sociales

Se está promoviendo el desarrollo de unas comarcas hoy en declive, que cuentan con producción natural y en la que es posible la plantación de trufa. Se ha alcanzado una integración del cultivo de la trufa en la población rural de esas comarcas, así como el asociacionismo en torno al mismo, lo que contribuye a una mayor comunicación y cohesión social entre sus habitantes.

Ecológicos

Se está logrando la recuperación de superficies forestales que se roturaron en su día para dedicarse a la agricultura, por necesidades de subsistencia. Hoy, con la práctica de la truficultura, han retornado a su vocación forestal y han adquirido el porte y la fisonomía casi de masas boscosas de encina, en la que se produce la trufa, a la vez que se ha logrado sensibilizar a los lugareños en el cuidado y conservación de la misma como recurso natural del monte que circunda en muchos casos las plantaciones truferas.

La truficultura tiene un futuro prometedor, la sociedad cada vez mas sensibilizada por la conservación de la biodiversidad y de los recursos naturales así como el uso racional de los mismos.

Como puntos importantes podemos destacar los siguientes:

  • Contribuye a la reforestación.
  • Diversifica la actividad agraria.
  • Evita la erosión y favorece la formación de suelo.
  • Es un cultivo ecológico, en armonía con el medio, siendo un producto natural autóctono.
  • Complemento de renta en áreas deprimidadas o marginadas.
  • Favorece el turismo y desarrollo rural y es una alternativa al declive de la trufa natural.