Más de un centenar representantes de la sociedad civil buscan las claves para la conciliación compartida

Markel Olano: “Este encuentro representa nuestra visión de hacer política, siempre de la mano de las guipuzcoanas y los guipuzcoanos”

Imagen del World cafe

En vísperas del Día Internacional de las Mujeres, la Diputación Foral de Gipuzkoa ha organizado un encuentro para debatir sobre la igualdad y la conciliación, en el que han participado 120 personas de diferentes colectivos y ámbitos de la sociedad guipuzcoana. Un “World Café” en el que mujeres y hombres han reflexionado para identificar cuáles son los retos a los que se enfrenta Gipuzkoa en este ámbito y aportar propuestas que serán incluidas en el futuro Plan Foral de Conciliación y Corresponsabilidad.

Este plan, que verá la luz próximamente, constituye uno de los ejes estratégicos de la Diputación en materia de igualdad, y pretende aportar medidas concretas hacia la conciliación y la corresponsabilidad. Otro de los ejes, de acciones contra la violencia, es el Plan Foral Aurre!, primer plan foral para enfrentar la violencia contra las mujeres, que fue presentado en noviembre del pasado año.

Por parte de la institución foral, en el World Café ha participado una nutrida representación política y técnica, encabezada por el propio diputado general Markel Olano y la directora del órgano para la igualdad de mujeres y hombres, Miren Elgarresta. Por otro lado, la representación ciudadana ha contado con personas procedentes del ámbito empresarial, educativo, familiar, institucional, etc. El diputado general ha destacado que el encuentro representa “la visión de hacer política de la Diputación, siempre de la mano de las guipuzcoanas y los guipuzcoanos”.

En ese mismo sentido, Markel Olano ha recordado que la Diputación cuanta ya con antecedentes como la celebración del 8M del 2016, el reciente Congreso de Igualdad y Conciliación, o las dos jornadas en el marco de Etorkizuna Eraikiz, proceso de reflexión compartido, en el que se están desarrollando varios proyectos piloto específicos sobre la igualdad y la conciliación.

La directora foral de Igualdad, por su parte, ha destacado el éxito de la convocatoria y ha recordado los datos de la campaña presentada ayer como motivo para llevar a cabo el “World Café”. Elgarresta también ha señalado que el formato elegido para el evento “posibilita la creación de redes informales de conversación y aprendizaje social, favoreciendo la comunicación y el intercambio de experiencias”, un modelo para aportar, desde la colaboración, respuestas y propuestas orientadas y basadas en el compromiso. Un formato en el que los y las participantes se han agrupado en torno a un total de 15 mesas de 8 personas cada una. Cada mesa se ha referenciado con nombres de mujeres guipuzcoanas valoradas por sus méritos: Catalina de Erauso, Kontxu Odriozola, Lourdes Iriondo, Elvira Zipitria, etc. Tal y como ha recordado Elgarresta, “visibilizar la aportación de las mujeres es fundamental para asentar la transformación social que perseguimos”.

Elgarresta ha destacado en su intervención la importancia de la corresponsabilidad, tanto para normalizar la vida socio-laboral del territorio, como para impulsar la creación de riqueza. “Las desigualdades nos competen a todos y todas; Gipuzkoa puede y debe aspirar a ser un referente en esta materia, y para ello, necesitamos que todos los agentes colaboren en este sentido”.

Para llevar a cabo la dinámica de trabajo se han planteado dos preguntas a las que han respondido todas las mesas: “¿Cuáles son los obstáculos que dificultan la conciliación de la vida profesional, familiar y personal?” y, “¿Qué acciones concretas propones para impulsar la conciliación y la corresponsabilidad?” Posteriormente, se han definido cuáles son los retos a los que la sociedad, y la Diputación, deben responder para favorecer la igualdad, la conciliación y la corresponsabilidad compartida.

Retos

  • Vincular modelos de gestión avanzada con el impulso de la igualdad, mediante auditorias en empresas en indicadores de igualdad, visibilización y valoración de las tareas de los cuidados, y crear leyes pioneras que aceleren el proceso.
  • Que la administración incentive en sus pliegos de contratación las buenas prácticas en materia de igualdad, conciliación y corresponsabilidad.
  • Impulsar un cambio cultural: Mayor corresponsabilidad de hombres, más servicios y más asequibles. Pasar de la recomendación y la declaración a la obligación y la exigencia de la normativa.
  • Para lograr la corresponsabilidad en cinco años en empresas de Gipuzkoa triplicar el número de directivas, prestigiar el feminismo puntuando los másteres de igualdad como el resto, y para ello son necesarias instituciones que impulsan, junto con la sociedad, organismos que vigilan, facilitan, premian y sancionan.
  • Implicación de las instituciones en el desarrollo y cumplimiento de políticas de igualdad con representantes formados, sensibles y que sean modelo de las mismas.
  • La igualdad debiera ser transversal en los siguientes ámbitos: medios de comunicación, publicidad, empresa, ámbitos privados y públicos (Osakidetza, educación, etc.).
  • Visibilizar y valorar prácticas corresponsales de personas referentes y de diferentes contextos convivenciales.
  • Sentirnos iguales y actuar desde ahí y dar valor al camino que hemos realizado.
  • Prestigiar los cuidados, cambiando la percepción de los roles de la mujer.
  • Elaborar un código ético para los medios de comunicación.
  • Autovaloración de las mujeres.
  • Sensibilizar a través de campañas.
  • Transformar un comportamiento privado y familiar en buen hábito social, hay que transversalizar las buenas prácticas personales a los ámbitos sociales de la educación, lo institucional y lo social.
  • Lograr la “tecla” de la efectividad más allá del discurso teórico de corresponsabilidad y convertir en nuestra seña de identidad colectiva.
  • Adecuación de horarios escolares y laborales, cambiar la cultura empresarial, cambiar la cultura social, cambiar los valores sociales, una orientación laboral efectiva que supere los estereotipos profesionales.
  • Promover que la totalidad de quienes ocupen puestos de responsabilidad asuman la perspectiva de la igualdad (para adecuar horarios, elaborar políticas, hacer pedagogía social...).