La importancia de los nematodos como parásitos de plantas es notable pero, muchas veces, desconocida por los agricultores. Ello es debido a que los nematodos no son visibles a simple vista, ya que los daños que causan son poco específicos y pueden ser atribuídos también a otros agentes crecimiento lento, falta de vigor, clorosis, etc.
Los nematodos son animales de forma cilíndrica con aspecto de pequeños gusanos alargados y transparentes. Existen varios miles de especies de nematodos; de entre ellos, algunos se alimentan de las plantas. Los nematodos que parasitan las plantas se denominan "fitoparásitos"; están dotados de una especie de aguijón o "estilete", que clavan en la planta, a través del cual absorben los jugos celulares.
Los nematodos pueden parasitar cualquier parte del vegetal, subterránea o aérea, pero la mayoría de las especies viven en el suelo y parasitan raíces.
Dado su pequeño tamaño, 0,2 - 2 mm de longitud y 0,01 - 0,04 mm de anchura, y que son tranparentes, no son observables al ojo humano; por ello es necesario recurrir a métodos de laboratorio para su correcto diagnóstico.