"Hay que asegurar a las víctimas que no se va a pasar página sin más"
"Hay que asegurar a las víctimas que no se va a pasar página sin más"
Con un mensaje centrado en la necesidad de cerrar las heridas del pasado por años de violencia y de no pasar página sin más, Maribel Vaquero intenta trasladar su experiencia municipal y parlamentaria a la Diputación de Gipuzkoa.
¿Cuál es su premisa a la hora de trabajar por la convivencia?
Vivimos en una sociedad en constante conflicto. Siempre hay diferencias relacionadas con la manera de pensar y actuar de las personas, pero debemos tener claro que para resolver cualquier cuestión no podemos emplear la violencia. El problema no es el conflicto, sino cómo lo solucionamos. Se trata de una lectura clara a tratar ya, no podemos esperar mañana para ello.
¿Observa en las víctimas del terrorismo interés en contribuir a avanzar en esta materia?
Estas personas están dando una gran lección de diálogo, de enfrentarse al pasado y tienen ganas de explicarse. Pueden aportar mucho y de hecho, lo están haciendo. Algunas de ellas acuden a las aulas a contar su testimonio a los jóvenes dentro de proyectos pedagógicos y están dejando constancia de lo que les ha sucedido. También se les puede escuchar en foros celebrados en diferentes municipios con el objetivo de dar a conocer su experiencia.
¿Y ve que sus actuaciones resultan productivas?
El mensaje de las víctimas está siendo muy positivo, porque no se centran en su sufrimiento, sino que hacen una lectura de cara al futuro en positivo. Y esto es la mayor garantía para que no se vuelva a repetir el conflicto que hemos sufrido. Transmiten ideas optimistas para trabajar por el futuro.
¿A ellas qué se les debe?
En primer lugar, hay que respetar su sufrimiento y ayudarles, y, en ningún caso, decirles lo que tienen que hacer, se trata de una cuestión muy personal. También debemos asegurarles que no se va a pasar página sin más a lo que les ha ocurrido. Nosotros también buscamos huir del revictimismo; es decir, no queremos dejar que la víctima sea víctima siempre.
¿Qué les demandan las víctimas?
Algunas nos están reclamando que contemos con ellas. También nos piden que dejemos al margen muchos comportamientos partidistas y que nos centremos en lo verdaderamente relevante.
¿Muestran las fuerzas políticas unas posturas muy enrocadas que dificultan avanzar en esta materia?
El pasado y la lectura que se haga de ella se presenta como una mochila muy pesada para los partidos. Algunos pretenden pasar página rápidamente, como si los derechos humanos tuviéramos que cumplirlos del presente en adelante. Sin embargo, otras formaciones están tan ancladas o enquistadas en el pasado que esto les impide mirar al futuro.
La entrada de nuevos partidos en la esfera política vasca, ¿puede favorecer a la convivencia?
La incursión de una nueva fuerza no tiene por qué poner dificultar los trabajos en esta materia siempre y cuando entiendan que es un tema a tratar y que no hay que hacer uso partidista de ello. La Diputación presentó su proyecto de convivencia en los municipios Bizikidetza Lantzen a todos los partidos con representación en las Juntas Generales y Podemos, al igual que el resto, nos mostró su intención a colaborar y a contribuir con sus ideas. Nos han mostrado una buena disposición.
¿Observa un avance en la sociedad?
Estamos constatando, generalmente en el ámbito local, una mayor interrelación entre diferentes ideologías, sobre todo por parte de los jóvenes. Sin embargo, todavía que mucho camino, porque en algunos lugares, y no únicamente las víctimas, todavía hay miedo a hablar de lo ocurrido y el sufrimiento. Y en esto se puede avanzar mucho desde los municipios.
La Diputación ha dirigido su mirada a emprender acciones de convivencia en las localidades a partir del proyecto Bizikidetza Lantzen, ¿en qué se busca hacer hincapié?
La labor en el ámbito local resulta interesante porque es el más cercano al ciudadano. El papel de los líderes municipales, y no me refiero exclusivamente a los políticos, también hago alusión a presidentes de asociaciones o vecinos que participan en la vida social de esos municipios y cuentan con un respeto por el camino que hacen por esa comunidad, resulta fundamental para trabajar por la convivencia. Su participación en estos proyectos resulta muy importante, porque arrastran y crean opinión. Por todo ello, desde la Diputación queremos ayudar a esos ayuntamientos a que creen foros, actividades o a asesorarles y estar cerca de ellos.
En el Parlamento Vasco ha quedado patente la dificultad de los partidos para lograr acuerdos. ¿Resulta más fácil en los municipios?
Seguramente. El ámbito local no se encuentra tan mediatizado y el pasado no les pesa tanto a los partidos. En los pueblos y ciudades existe únicamente la presión de la ciudadanía. Además, resulta más sencillo llegar a los vecinos y dar una continuidad a los proyectos.
¿También habrá que incidir en los jóvenes?
En unas jornadas recientes con la juventud, ellos nos transmitieron la queja de que en sus casas no se hablaba de lo que ha pasado en Euskadi. Por ello creemos importante que se dé una transmisión generacional de valores dentro de las familias. Se trata de una educación democrática que también resultará positivo para afrontar otros conflictos...
... ¿Como el ocurrido el pasado martes en Vitoria con el ataque a una mezquita
En la Diputación también nos preocupa ese tipo de sucesos y queremos trabajar en proyectos que se centren en respetar la diferencia entre diferentes, ya sea religioso, gustos sexuales, etcétera. En este sentido, estamos preparando programas para trabajar la interculturalidad y los Derechos Humanos, porque es un aspecto que valoramos importante.
"La UE incumple el derecho de asilo firmado en su día"
¿Está vulnerando Europa los derechos humanos de los refugiados?
Los estados de la Unión Europea están incumpliendo la declaración de derechos humanos y la Convección de Ginebra. No está respetando el derecho de asilo que firmaron en su día. Se está produciendo un auténtico drama humano en las fronteras y no va a ser una página muy brillante en nuestra historia, ya que muchas personas están perdiendo la vida no por la guerra sino por llegar a lugar seguro.
¿Tiene la Diputación las manos atadas para ayudar?
Son temas que se tratan entre los estados, los cuales deben mostrar responsabilidad y solidaridad. La Diputación, al igual que el Gobierno Vasco, no tiene casi margen de maniobra.
¿Cómo puede colaborar?
Nuestro ámbito de intervención se centrará en la inserción social de los refugiados que lleguen a Gipuzkoa, en su acompañamiento. A su vez, podremos actuar en la concienciación y sensibilización social de los ciudadanos del territorio para evitar comportamientos xenófobos, no respetuosos y evitar los prejuicios al diferente.
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